Reflujo Gastroesofágico
El esófago es el órgano en forma de tubo, que conecta la boca con el estómago para transportar alimentos, líquidos y saliva, principalmente. Cuando el contenido del estómago, regresa hacia el esófago se denomina reflujo gastroesofágico. El estómago, de forma normal, tiene un contenido ácido, por lo que cuando éste regresa hacia el esófago, puede irritar su mucosa.
Reflujo Gastroesofágico
El esófago es el órgano en forma de tubo, que conecta la boca con el estómago para transportar alimentos, líquidos y saliva, principalmente. Cuando el contenido del estómago, regresa hacia el esófago se denomina reflujo gastroesofágico. El estómago, de forma normal, tiene un contenido ácido, por lo que cuando éste regresa hacia el esófago, puede irritar su mucosa.
El reflujo puede suceder de vez en cuando, sin embargo cuando sucede más frecuentemente de lo esperado, o cuando ocasiona síntomas y molestias que afecten la calidad de vida, se considera como enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE).
Los síntomas más comunes del reflujo gastroesofágico son:
Sensación de que se “regresa” líquido o alimento hacia el esófago o la boca (regurgitación)
Sensación de ardor o quemazón en el pecho (pirosis)
Sensación de nudo en la garganta
Dolor en el pecho acompañado de los síntomas previos
Empeoramiento de estos síntomas por la noche (al estar acostado)
Presentar cualquiera de estos síntomas, requiere una valoración por un experto. Acude con tu gastroenterólogo de confianza.
¿Existen otras causas de estos síntomas?
Si. Existen otras condiciones tanto gastrointestinales, cardiovasculares, musculares u óseas que pueden dar síntomas similares. Por ello, lo principal para un tratamiento adecuado, es un diagnóstico preciso, por lo que es importante consultar a tu gastroenterólogo de confianza antes de iniciar un tratamiento.
¿Existen otras causas de estos síntomas?
Si. Existen otras condiciones tanto gastrointestinales, cardiovasculares, musculares u óseas que pueden dar síntomas similares. Por ello, lo principal para un tratamiento adecuado, es un diagnóstico preciso, por lo que es importante consultar a tu gastroenterólogo de confianza antes de iniciar un tratamiento.

¿Cuáles son los datos de alarma de reflujo gastroesofágico?
El presentar síntomas de reflujo es señal de acudir con tu gastroenterólogo de confianza. Sin embargo, existen algunos síntomas que se consideran “datos de alarma” que pueden significar una urgencia médica que incluyen:
Dolor en el pecho (se debe de descartar urgentemente un problema cardiaco)
Dificultad o incapacidad para deglutir o para pasar alimentos o líquidos
Sensación de que los alimentos se atoran al deglutirlos
Pérdida de peso no explicada (sin cambios en la dieta o actividad física)
Vómito con sangre o evacuaciones negras
En caso de cualquiera de estos, consulta de inmediato a tu gastroenterólogo de confianza o acude al servicio de urgencias más cercano.
¿Cuáles son las consecuencias de padecer reflujo gastroesofágico?
A corto y mediano plazo, el reflujo gastroesofágico puede afectar tu calidad de vida por los síntomas que provoca. Esto puede impactar en la calidad del sueño, limitar la ingesta de ciertos alimentos y causar malestar en tu vida cotidiana.
La exposición del esófago al ácido y contenido del estómago de manera crónica pueden ocasionar la inflamación de la mucosa esofágica, conocida como “esofagitis”. La esofagitis a su vez puede derivar en:
Estenosis esofágica (reducción del diámetro del esófago): por la cicatrización asociada a la inflamación, el esófago estrecharse y dificultar el paso de los alimentos hacia el estómago.
Esófago de Barrett: La inflamación del esófago por largo tiempo, puede hacer que las células muten y cambien su forma, derivando a cambios en la mucosa conocidos como esófago de Barrett (lesión premaligna).
Cáncer de esófago: la misma transición en el tipo de células que da lugar al esófago de Barrett, es susceptible a cambios genéticos más severos y derivar en adenocarcinoma esofágico.
¿Cuáles son las consecuencias de padecer reflujo gastroesofágico?
A corto y mediano plazo, el reflujo gastroesofágico puede afectar tu calidad de vida por los síntomas que provoca. Esto puede impactar en la calidad del sueño, limitar la ingesta de ciertos alimentos y causar malestar en tu vida cotidiana.
La exposición del esófago al ácido y contenido del estómago de manera crónica pueden ocasionar la inflamación de la mucosa esofágica, conocida como “esofagitis”. La esofagitis a su vez puede derivar en:
Estenosis esofágica (reducción del diámetro del esófago): por la cicatrización asociada a la inflamación, el esófago estrecharse y dificultar el paso de los alimentos hacia el estómago.
Esófago de Barrett: La inflamación del esófago por largo tiempo, puede hacer que las células muten y cambien su forma, derivando a cambios en la mucosa conocidos como esófago de Barrett (lesión premaligna).
Cáncer de esófago: la misma transición en el tipo de células que da lugar al esófago de Barrett, es susceptible a cambios genéticos más severos y derivar en adenocarcinoma esofágico.

Una vez confirmado el diagnóstico de enfermedad por reflujo gastroesofágico, el pilar del tratamiento consiste en disminuir la producción de ácido gástrico para evitar que éste irrite la mucosa del esófago, mediante medicamentos específicos.
Existen también cambios en el estilo de vida que pueden ayudarte a mejorar esta condición y a reducir la cantidad de contenido gástrico que regresa hacia el esófago, como:
- Bajar de peso.
- Dejar de fumar y beber alcohol.
- Levantar la cabecera de la cama.
- Dejar pasar un par de horas después de cenar para irse a dormir.
En casos muy particulares y pacientes bien seleccionados, la cirugía puede ser una alternativa, pero siempre iniciando con tratamiento farmacológico y complementando con estudios de fisiología gastrointestinal antes de considerar la cirugía.
Existen tratamientos endoscópicos (no quirúrgicos) que en casos seleccionados pueden mejorar los síntomas. Consúltalo con tu gastroenterólogo de confianza.
Es importante que no te automediques y que acudas con tu gastroenterólogo de confianza para poder brindar el diagnóstico correcto, tratamiento individualizado y prevenir las consecuencias crónicas del reflujo gastroesofágico.
Recuerda que no existen dos pacientes iguales, cada caso es único. Si el reflujo gastroesofágico va y viene o estás cansado de vivir con las molestias, lo mejor es visitar a un especialista en reflujo gastroesofágico.
Soy el Dr. Álvaro Valladares, gastroenterólogo especialista en reflujo. Contáctame para encontrar la mejor opción de tratamiento y trabajar juntos hacia tu bienestar.

Existen tratamientos endoscópicos (no quirúrgicos) que en casos seleccionados pueden mejorar los síntomas. Consúltalo con tu gastroenterólogo de confianza.
Es importante que no te automediques y que acudas con tu gastroenterólogo de confianza para poder brindar el diagnóstico correcto, tratamiento individualizado y prevenir las consecuencias crónicas del reflujo gastroesofágico.
Recuerda que no existen dos pacientes iguales, cada caso es único. Si el reflujo gastroesofágico va y viene o estás cansado de vivir con las molestias, lo mejor es visitar a un especialista en reflujo gastroesofágico.
Soy el Dr. Álvaro Valladares, gastroenterólogo especialista en reflujo. Contáctame para encontrar la mejor opción de tratamiento y trabajar juntos hacia tu bienestar.
Contáctame
Con entrega y dedicación, asumo el compromiso de proporcionar cuidados de excelencia de los distintos padecimientos del tracto digestivo:
- Reflujo gastroesofágico
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